domingo, 15 de noviembre de 2015


ANÓNIMA
(Víctor Botas)

Ni muy feliz, ni triste. Como tantas,
parecerá insensible a cuanto pueda
ocurrir a su lado. Cada día
andará iguales calles y las mismas
sombras la mirarán pasar. No habrá ninguno
capaz de distinguirla de las otras,
así, a primera vista. Cada día
se va muriendo un poco (no comulga
con esa triste rueda de molino
de la moderna mística; el trabajo,
rutinario y vulgar —bien lo comprende—
la embrutece y anula). Y qué remedio
queda. Y qué remedio.
Pero yo sé que guarda
intacta esa frescura y delicada
del corazón ardiente y una innata,
joven curiosidad. Estará sola,
como solos están los que, de un modo
u otro, son acaso diferentes.
Y no sospechará que hubo una tarde
en la que fue dictándome un poema.


Pintura: Marc Chalmé

miércoles, 26 de noviembre de 2014

Haikus del Club de los Poetas Vivos

Selección del Taller de Haikus del pasado domingo...


Bruma en la falda
de la montaña arada.
Sol de sombrero.

(Encarna Valle)


En la pizarra azul del cielo
escriben con tiza
tu nombre los aviones.

(Julián Abajo Alonso)


El cosmos abriéndose.
Mi corazón 
se abraza al monte.

(Pilar Ruíz Palacios)


Rociando estrellas 
llega la noche 
a tu mullida almohada. 

(Ángel Ramón Larrosa)


Ventana al cielo
de sus ojos claros.
Marco infinito.

(Xavier Crego)


Tres niveles
como tres estrofas
tienen los haikus.

(Carmela Pérez)


Luz derramada
en el tiempo
del latido.

(Héctor Ethos)


Balcón vacío
bajo los plataneros.
Vértigo verde.

(Encarna Valle)


Se pierde la senda,
se hace agua...
Río, camino.

(Julián Abajo Alonso)


Colina verde,
cielo azul.
Hogar en éxtasis.

(Pilar Ruíz Palacios)


No te escondas 
entre las ramas,
tu luz te delata.

(Ángel Ramón Larrosa)



Te miras al espejo
te duplicas en él
y vuelves a verte.

(Carmela Pérez)


Niñez en la aldea:
lanzo la caña,
vuelan escamas.

(Xavier Crego)


Color difuso.
Se enreda
en los pies.

(Héctor Ethos)


Nube de ramas.
Reflejo del espejo.
Raíz de árbol.

(Julián Abajo Alonso)


Mar de nubes,
algodón
para los montes.

(Pilar Ruíz Palacios)


Se oculta el sol.
Pentagrama de nubes,
canción rojiza.

(Ángel Ramón Larrosa)


Situaciones:
Espacios que brillan,
reverberando.

(Héctor Ethos)


El ojo del puente
se traga el río
y lo devuelve.

(Julián Abajo Alonso)

lunes, 17 de noviembre de 2014

Taller de haikus


Sobre la arena
escritura de pájaros:
memorias del viento.

Octavio Paz



¿Quieres experimentar el arte del haiku? 
¡Ven y compártelo con nosotros!
Propondremos un ejercicio sencillo para que puedas crear tus propios haikus.

Cuándo: este Domingo, día 23, a las 18h

Dónde: El Diván de los Sentidos: C/Cornellà Modern, 16 (Metro L5 Cornellà Centre)

Actividad gratuita (Consumición mínima obligatoria)



martes, 22 de abril de 2014


ALAS, TENGO ALAS EN LA LENGUA…
(Isabel de los Ángeles Ruano)

Alas, tengo alas en la lengua,
mi cuerpo está cubierto de alas,
son miles de alas que me crecen,

una multitud de pequeñas alas sonoras.

Mis palabras son alas blancas,
alas, alas de espuma o nube,
alas tremendas que me cubren, que me laceran.

Y sin embargo no vuelo con mis alas.

Alas de mis Ángeles,
dulces alas que me renuevan,
alas tristes con que me envuelvo,
aladas alas por las que vivo.

Soy un árbol de alas
con alas que me brotan como hojas,
con hojas muertas que me vuelan como alas.

Soy un mar de alas,
un cielo de alas que resuenan.

Alas de mi nombre,
sinfonía de alas en mí misma.

¡Cómo suenan mis alas!

¡Cómo intentan mis alas batir el vuelo!
¿Cómo estoy en la tierra con mis alas a cuestas?
¡Cómo estoy en el viento sin volar con mis alas!

Soy un ala gigante,
soy millones de alas minúsculas,
soy un porvenir, un destino de alas,
y junto al infinito de mis alas peregrinas
pronuncio esta oración de alas aleteantes
para redimirme en nombre de esas alas sonoras.


«Alas de mi nombre, 1», en Cariátides, 1967.
Imagen: Dasha ShaDe


viernes, 21 de marzo de 2014


AUNQUE FALTE A TU VIDA...
(Mariano Brull)

Aunque falte a tu vida la paz, y la alegría
nunca te sonriese sobre el camino adverso,
que llene tu existencia siempre la poesía
como ha de rebosar el molde de tu verso.

Con los ojos cerrados busca el mundo en ti mismo;
la mujer que no has visto, la ciudad que no existe;
y, al abrirlos, tus ojos verán en espejismo
aparecer la vida como tú la quisiste.

No sentiremos nada de nuestro ser distinto,
y todo será unánime, el gusano y la flor;
y viviremos siempre sin salir del recinto
de la luz que proyecta nuestro sueño interior.

No cegará tus ojos el esplendor del mundo,
y pasarás, sonámbulo, absorto en tu universo,
mientras late tu alma en el ritmo profundo
que toma de la vida el alma de tu verso.

Nada sobre la Tierra te será indiferente;
mirarás a las cosas con mirada segura;
serás luna en la luna que baja hasta la fuente,
serás llama en la llama que sube hasta la altura.

Sólo sabrás dos cosas: de amor y de belleza.
Lo demás... nada importa. Toda la vida es
amar; sentir lo bello; tener una tristeza
para que un alma hermana nos la cure después.


Óleo: Tanjian Wu

martes, 25 de febrero de 2014


LA VEJEZ ES UNA MÁSCARA
(José Bergamín)


La vejez es una máscara: 
Si te la quitas, descubres 
El rostro infantil del alma.


La niñez te va siguiendo 
Durante toda la vida. 
Pero ella va más despacio 
Y tú andas siempre de prisa.


Cuando la vejez te llega, 
No es que vuelves a la infancia, 
Es que moderas el paso 
Y al fin la niñez te alcanza.




Imagen: Patrick Gonzales

viernes, 9 de agosto de 2013


MANTENIENDO LAS COSAS INTACTAS 
{Mark Strand}


En un campo
yo soy la ausencia
de campo.
Esto es
siempre así.
En donde esté
soy lo que falta.

Cuando camino
parto el aire
y siempre
el aire viene
a llenar los espacios
donde ha estado mi cuerpo.

Todos tenemos razones
para movernos.
Yo me muevo
para dejar las cosas intactas.


Fotografía: Jean-Paul Bourdier